Sé lo que viste el fin de semana pasado.../VII
CARTELERA PARA EL 9 DE NOVIEMBRE
O más bien: sé lo que NO viste el fin de semana pasado. Entre las películas de la 49 Muestra que tengo que ver, entre las que vi pero que no se estrenaron (como el aburrido melodramón revolucionario Olga), entre las que pude ver pero que no vi porque mis editoras -por fortuna- no me las encargaron (los churrazos Mi Ex y El Regreso), entre las que pude ver pero decidí saltármelas (Leones por Corderos) y entre las que tengo pendientes por falta de tiempo (Eros, una Vez María, cuya primera media hora vi en Guadalajara 2007 antes de salir corriendo a otra función -creo que de El Violín), este fin de semana sólo pude revisar una sola cinta de la cartelera comercial. Y hasta eso, creo que fue la mejor:
El Mundo Mágico de Terabithia (Bridge to Terabithia, EU, 2007), de Gabor Csupo. Una verdadera sorpresa, por lo menos para mí, que desconocía prácticamente todo acerca del filme: de su sensible e inteligente trama que defiende el valor de la imaginación y la validez de la solidaridad, que está basado en un exitoso libro infantil de Katherine Peterson, que es la segunda adaptación cinematográfica de la historia (hay un telefilme de 1985 que no he visto, pero mi hija sí). Un buen filme infantil para niños -y adultos- maduros. Reseñada en Reforma y Mural .
Comentarios
El tema es bueno, pero no aporta nada nuevo y nos da hora y media de duelo verbal sin parar, con sólo dos escenas separadas de Tom Cruise vs. Merryl Streep y Robert Redford vs. un morro que no conozco, más unos flashbacks y unas cuantas escenas de combate en un cerro X, con un negro y un chicano olvidados por el sistema (los mentados leones por corderos). Todos son muy buenos pero la historia de conveniencias ocultas y no tan ocultas nunca levanta.
Tu reseña del Reforma me llamó mucho la atenció sobre Terabithia, pero no estoy dispuesto a soportar el doblaje. La cacharé en DVD.
Yo lo que ví el fin de semana pasado, fue Halloween de Zombie (whoa) y la de los cortos mexicanos, que valió la pena porque entre tanta mediocridad se les coló una obra maestra absoluta.
Errr, espero no pecar de indiscreto, Ernesto, pero ¿vives en el DF o en provincia?