Canana-on-demand
Pues hasta que alguien me escuchó... Desde este espacio y desde hace tiempo, me preguntaba por qué nadie en México seguía la propuesta del cineasta y productor Steven Soderbergh de echar abajo las llamadas "ventanas de distribución". Me refiero a acabar con la distancia temporal que separa el estreno comercial de un filme de su explotación en DVD, en televisión pay-per-view y en televisión por cable. Mi argumento es simple: si es complicado ver cine mexicano por las razones que usted quiera esgrimir, ¿por qué jugar con las viejas reglas de la distribución fílmica, creadas hace 20, 30, 40, 50 años? ¿Por qué no crear unas nuevas? ¿Por qué no experimentar, como lo hizo exitosamente Soderbergh con Bubble (2005), estrenada al mismo tiempo en un pequeño número de salas comerciales, en DVD y en video-on-demand?
Canana Films ha decidido jugar la apuesta. Hoy se estrena en unas cuantas salas defeñas la meritoria opera prima de Jonás Cuarón Año Uña (2007) -mi reseña está en REFORMA- y, casi al mismo tiempo, la película se podrá ver en Cablevisión a partir del próximo lunes en el formato de video-on-demand. Para que el círculo estuviera completo, debieron haber puesto en venta y/o renta el DVD con algunos extras interesantes. Pero, bueno, por algo se empieza. Le deseamos toda la suerte comercial del mundo a Canana con este experimento que, esperemos, sirva de ejemplo a otras distribuidoras y productoras nacionales. Carajo, que se vea el cine mexicano cómo sea, donde sea y en las condiciones que sean, pero que se vea. ¿O qué? ¿Hacen cine para enlatarlo?
Comentarios
2046
O de plano, también deberá cambiar algo.
Y no lo dude que "esa" sea una de las razones por las que no se animan a hacer más aventuras de este estilo: ¿Y ya no podríamos ondear premios? Pos mejor no lo hacemos, total, el cine en México los pagan los que votan y los que no votan y los que botan.
Yo soy el primero que siempre entro a las tiendas de DVDs buscando las películas mexicanas que nunca se estrenan en el rancho.
Ahí sí creo que podrían capitalizar más con su imagen para la venta de los DVDs. Imagino un exhibidor de Canana, prefabricado de cartón con la foto de Bernal y Luna haciendo algo como la Ebertseñal y con un globito que dijera algo como "Acá las películas"; ya después podrían ir desapareciendo sus fotos y dejar sólo el nombre Canana.