Sé lo que viste el fin de semana pasado/CCVI
X500 (Colombia-México-Canadá, 2016), de Juan Andrés Arango García. El segundo largometraje de Arango -después de La Playa DC (2013), de la cual escribí unas líneas por acá- es un convencional pero muy bien realizado docudrama sobre tres jóvenes migrantes afrontando sus propias broncas en tres distintas partes del mundo.
En México, el indígena mexicano David (Bernardo Garnica Cruz) sale de Michoacán para irse a trabajar como albañil a la Ciudad de México, en donde se topa con la exótica -para él- cultura marginal punk; en el remoto pueblo pesquero de Buenaventura, Colombia, Alex (Jonathan Díaz Angulo), que recién acaba de regresar de Estados Unidos, se involucra con una banda de malandrines locales al mismo tiempo que trata de proteger a su hermanito menor; y en Montreal, Canadá, la filipina María Arroyo (Jembie Almazán) llega a vivir con su abuela, aunque muy pronto demostrará que el cambio de aires hacia el primer mundo no ha resultado ser tan bueno para ella.
No hay conexión explícita entre estas tres historias, pero tanto la experta edición de Felipe Guerrero como el buen desempeño de todo el reparto -no profesional, por cierto-, ayuda a que el discurso dramático más o menos obvio -he aquí tres jóvenes migrantes que afrontan problemas de violencia, pobreza y desplazamiento existencial- no se vuelva tan pesado. La película ganó el primer premio en la sección México Primero de Los Cabos 2016. (* 3/4)
Rush Hour (México, 2017), de Luciana Kaplan. Cinta ganadora al premio del mejor filme documental en Morelia 2017. Escribí de ella por acá. (* 1/2)
La muerte de Stalin (The Death of Stalin, GB-Francia-Canadá-Bélgica, 2017), de Armando Iannucci. Escribí largo y tendido de esta estupenda comedia negra -y de su más claro antecendente, una cinta rusa de Alexei German- por acá, en Letras Libres. (***)
Nace una estrella (A Star is Born, EU, 2018), de Bradley Cooper. La opera prima del actor convertido en cineasta Cooper es la quinta iteración oficial hollywoodense -sexta en realidad, enésima si contamos las innumerables versiones que se han realizado en otras industrias fílmicas- de la típica historia paralela del nacimiento de una estrella y el declive de otra. Escribí mi crítica en el blog de Patreon por acá (lo puede leer por un mísero dolarito) y escribí este otro texto en Confabulario de El Universal acerca de las anteriores versiones hollywoodenses de la misma historia. (* 1/2)
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