Sé lo que viste el fin de semana pasado/CCXXXIV
Línea de Emergencia (The Call, EU, 2013), de Brad Anderson. El otrora interesante cineasta independiente Brad Anderson entrega aquí un thriller femenino que, a pesar de su inteligente premisa, termina fracasando por una última media hora desastrosa. Mi crítica, en el Primera Fila del Reforma del viernes pasado.
Palabras Mágicas (para romper un encantamiento) (México-Guatemala, 2012), de Mercedes Moncada. De las mejores películas mexicanas del año. Ya escribí largo y tendido de ella hace varios meses por acá.
Halley (México, 2012), de Sebastián Hoffman. La opera prima de Hoffmann fue lo mejor, en cuanto a cine de ficción mexicano se refiere, de todo lo que vi en Morelia 2012. Con una clara
influencia del primer David Cronenberg, he aquí a
Beto (espléndido Alberto Trujillo), el apocado vigilante de un gimnasio
quien, literalmente, se está pudriendo. Beto sufre de una enfermedad
ficticia -o condición, más bien- por la cual le aparecen llagas
terribles por todas partes, se le caen las uñas, le aparecen larvas de
mosca en la piel, sangra cuando se lava los dientes, etc. No es un
muerto viviente pero eso parece: de hecho, en una de las mejores escenas
del filme, Beto termina siendo confundido con un cadáver.
Halley no es una película de horror, por cierto, aunque a veces
sea difícil mantener la vista en la pantalla. Hoffmann se muestra como
un cineasta hecho y derecho, seguro en sus recursos y con un equipo de
producción impecable (foto de Matías Penachino, dirección de arte de
Gabriela Garcíandia y espléndido maquillaje). Buscándole chichis a las
culebras -digo, para usar de manera elegante el idioma de Cervantes- tendría que decir que el
final abierto -que me remitió al desenlace de Frankenstein o el Moderno Prometeo, la novela- no me convenció en lo absoluto.De todas formas, de lo mejor del cine mexicano estrenado comercialmente en lo que va del año.
Comentarios
Alguna ventaja tenía que tener trabajar a dos cuadras del Cinepolis Diana...
me lleva, yo hasta pensaba pedir una crepa...
Y ni siquiera fue la versión de la vaca o del caballo, fue la de George Carlin... ewwwwww, me acorde
wow!
a mi el final me remitió a To The Edge of Heaven, aunque aquel era optimista y poético, este es como el negativo de ese.
Pd: me dijeron tanto que estaba asquerosísima que mi mente la dimensionó mucho peor de lo que en realidad estuvo. Tal vez fue psicología inversa je
Esta película ya se fue directito a mis magníficas del 2013, seguro que sí.
Esta es una película sobre la soledad, no sobre la enfermedad...
Pero bueno, siento la sombra de Hitch detrás de mi, negando con la cabeza y diciendo "cht cht cht, muy mal muchachito, muy mal, es usted un amigo de lo verosímil"
:D
Christian: Sí, esa escena es la mejor de todas, la de la morgue.