Sé lo que viste el fin de semana pasado/CCLI

Había una vez en... Hollywood (Once Upon a Time in... Hollywood, EU, 2019), de Quentin Tarantino. Escribí laaaaargo y tendido del noveno largometraje tarantinesco por acá. Lean también las decenas de comentarios.

Asako I & II: Soñar y despertar (Netemo sametemo, Japón-Francia, 2018), de Ryûsuke Hamaguchi. Escribí en pocas palabras de esta cinta por acá.

Diamantino (Portugal-Francia-Brasil, 2018), de Gabriel Abrantes y Daniel Schmidt. El Diamantino del título (Carloto Cotta) es la máxima estrella del futbol portugués, una especie de versión beatífica de Cristiano Ronaldo. Su talento sobrehumano es completamente natural y proviene de una visión que tiene cada vez que está en la cancha de fut: cuando Diamantino está con el balón frente a él, solo ve nubes de algodón y enormes perritos falderos y peludos. El problema es que en cierto momento clave -el tiro de un penal en la final de la Copa del Mundo-, deja de tener esas visiones y, por lo tanto, cual (tar)Hugo Sánchez, Diamantino falla vergonzosamente, lo que le provoca una crisis existencial, que empeora con la súbita muerte de su papá (Chico Chapas) y las maquinaciones de sus malvadas hermanas gemelas (Anabela y Margarida Moreira), quienes buscan dejarlo en la calle. Como forma de salir de ese bache, el noble Diamantino decide adoptar un refugiado sudafricano, quien resulta ser una agente secreta (Cleo Tavares) del gobierno portugués, quien se hace pasar por un adolescente africano para investigar los turbios estados financieros de Diamantino -culpa de las malosas hermanas, por supuesto. Más broncas enfrenta el deportista, pues un científico loco lo somete a una serie de pruebas para clonarlo, al mismo tiempo que el pobre inocente  sirve de representante de un grupo de ultraderecha que buscar sacar a Portugal de la Unión Europea. Ah, ¿y ya comenté que Diamantino y Aisha, la agente secreta, empiezan a atraerse, a pesar de que ella es lesbiana y él... bueno, quién sabe qué sea?

Abrantes y Schmidt -quienes han dirigido a cuatro manos otro cortometraje juntos- han realizado esta inclasificable comedia alegórica sobre el estado de la Europa contemporánea que atraviesa géneros, temáticas y reflexiones -sociales, sexuales, raciales, culturales económicas, you name it- en un tono consistentemente juguetón. Estamos ante una muy divertida cinta que nunca se toma muy en serio y que, por lo mismo, tiene mucho más impacto y alcance en los temas que trata. Carlotto Cotta, como el inocentón Diamantino, tan inocente como un niño de seis años, resulta genuinamente encantador.

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