007 Spectre
En la muy disfrutable -por lo nostálgica- escena final de 007 Spectre (Spectre, GB-EU, 2015), vigésima-cuarta cinta oficial de la saga Bond y cuarto filme protagonizado por Daniel Craig como el 007, el fan jamesbondesco más avezado puede leer el desenlace de dos maneras distintas: se trata de la dignísima despedida de Craig del papel de su vida o, por el contrario, estamos ante un punto de inflexión en la historia del nuevo Bond y, por lo tanto, al 007 de Craig le esperan -si así lo quiere- más aventuras y, muy probablemente, más sufrimiento.
Dirigida por Sam Mendes en su segundo encargo jamesbondesco -después de la obra mayor 007 Operación Skyfall (2012), acaso la mejor cinta de toda la saga-, 007 Spectre es, sin duda, la más tradicional película de la serie protagonizada por Craig. No solo aparecen todos los personajes secundarios claves que han rodeado al 007 desde siempre -Miss Moneypenny, "M", "Q" y hasta se menciona al agente de la CIA Felix Leiter-, sino que vemos finalmente al villano jamesbondesco por definición -cuya perversa organización ya daba lata desde El Satánico Dr. No (Young, 1962)- y, por si no fuera poco, el descomunal Dave Bautista encarna al típico matón de pocas palabras -ecos del Oddjob de la era Connery o el Mandíbula de la época de Roger Moore- que trae como lazo de cochino al 007 en cierta violenta pelea que termina como suelen finalizar estos duelos: con la sorda emisión de una sola palabra.
El argumento firmado por John Logan, Neal Purvis y Robert Wade -autores también de 007 Operación Skyfall- presenta, pues, una ruta bien conocida con las paradas en los sitios esperados -el momento en el que el protagonista se identifica como "Bond, James Bond", la escena en la que pide su martini "shaken, not stirred", el infaltable regaño de "M", la inevitable visita a "Q", el acostón con la nueva Chica Bond (Léa Seydoux)- pero, también, ofrece novedades nada desdeñables, pues los personajes que rodean al 007 no son más una mera fauna de acompañamiento sino que terminan convertidos en parte del equipo de Bond, como si estuviéramos en una versión más de otra célebre saga de espionaje, la de Misión: Imposible. Así pues, Moneypenny (Naomie Harris) no es la secre coqueta enamorada del 007 sino una hábil colaboradora que tiene vida propia, el "Q" de Ben Whishaw tiene el papel más importante en toda la historia de la saga -de hecho, alguien por ahí anotó con razón que hay más rapport entre "Q" y Bond que entre el 007 y Moneypenny-, y "M" (Ralph Fiennes) sirve para algo más que encarnar la rígida autoridad paterna: es un espía hecho y derecho, listo para entrar en acción cuando el caso lo amerite.
Hay otro elemento a subrayar: a diferencia de todas las demás épocas jamesbondescas, en la de Daniel Craig sí hay consistencia y continuidad entre una cinta y otra. Más allá de la aparición de los personajes de otras películas -el Mr. White de 007: Casino Royale (Campbell, 2006) y 007 Quantum (Forster, 2008), o el cameo clave de la fallecida "M" (Judi Dench), cual Control dirigiendo desde la tumba el destino de este carismático Smiley-, hay una evolución del personaje que nunca se logró -ni se intentó, a decir verdad- en las otras eras. Esto hace más rico a un personaje que, en el fondo, no es más que el anacrónico arquetipo del decidido, flemático y eficaz caballero del poderoso Imperio Británico -un personaje que, en realidad, ya era anacrónico en El Satánico Dr. No.
Sin embargo, si bien he mencionado todas estas virtudes, también tengo que dar cuenta del gran problema de la película: una letal falta de balance en el ritmo, que hace que 007 Spectre se aletargue peligrosamente después del extraordinario prólogo ubicado en el DF, el mejor de la era Craig y uno de los mejores en la historia de la saga. De hecho, no es hasta la persecución automovilística en Roma -con guiños a la inalcanzable ligereza de la divertidísima Faena a la Italiana (Collison, 1969)- y, posteriormente, la pelea a puñetazo limpio entre Hinx (Bautista) y el 007, que la historia sale de su sopor para entrar a su mejor momento: el enfrentamiento climático entre Bond y el villano amante de los gatos de angora que, esperemos, le siga haciendo la vida imposible al espía británico en su próxima aventura, la número 25.
Yo, en todo caso, espero que así sea: a como va el desarrollo de la saga, al 007 de Craig le quedan por lo menos un par de películas más para terminar siendo, si no el mejor James Bond de toda la historia, por lo menos sí el más complejo.
Comentarios
Lo que mas gusto da es que sigues siendo un Fan de la Serie, gusto que Compartimos como ya sabes.
saludos
Entre un arranque espectacular y tanta nostalgia esparcida lo que abunda es un tremendo sopor en momentos inmanejable.
Creo que en este episodio los villanos (ni Bautista ni Waltz) no aportan la sufiente pimienta o en la intensidad adecuada para sacudirnos del sopor y la nostalgia, lo cual no es culpa de ellos, mis respetos para el fortachon grandote quien no desmerece frente al oscarizado austríaco, a pesar de sus dos lineas (no necesita mas), creo que junto a Q son lo mejor de este episodio.
La nueva chica Bond niguas tampoco, un par de tomas espectaculares como la que utlizaste para tu entrada pero no mas, tampoco ayuda para elevar la temperatura, no es suficiente ni está a la atura de la Chica Bond que despedirá a Craig...
Total que nop. Siendo objetivos y con todo el dolor de mi corazón nop. Decir que cumple o que el balance es positivo no me parece justo. No es lo que uno espera de Bond. James Bond.
2046
http://www.eluniversal.com.mx/articulo/espectaculos/cine/2015/11/3/craig-ve-en-idris-elba-sucesor-de-bond
Como te caería un James morenito?
Aunque tu quieras que Daniel siga yo ya voy a empezar a rezar porque dejen a Idris.
2046
Lo que si estuvo muy chido es el plano secuencia del principio. Y si se fijan bien, por ahí hay una toma del edificio donde trabajo yeeeiii
:P
Carlos: Intenté recordar en qué otra cinta aparecía más Q y jugaba un papel central y no recordé esa que mencionas. Pero, bueno, la época de Timothy Dalton no la recuerdo en lo absoluto, para ser francos.
Champy: Bueno, lo que uno espera o no espera de una cinta no lo puede controlar los hacedores del filme. Yo no veo ningún desastre. Y en cuanto a que siga Craig, lo lógico es que, por lo menos, continúe en una película más si es que pasa lo que es lógico que suceda, según la evolución del personaje y la saga.
Christian: ¿Tienes algún puesto de guajolotas en el zócalo?
1-Mancera gasta dinero a lo pendejo.
2-La calle de Tacuba se transforma en 20 de noviembre y te saca enfrente de la catedral.
3-En México puedes tirar un edificio, caminar bien concha pistola en mano y los policías seguirán parados como pendejos. Eso sí no se me hizo tan raro.
4-Stephanie Sigman no se le antoja ni al calenturiento de James Bond. A Mancera menos, es gay.
5-Las calaveras Fridas patinan pocamadre.
6-Los extras mexicanos actúan de la ch...
7-Sam Mendez y Danniel Craig ya están hasta la madre de James Bond.
8-A los mexicanos les gusta que los folcloricen, los humillen,los dejen cachondos y además, pagan por eso.
9-Monica Belucci ya pellejeó.
Carlos, en la semana acabo de ver (otra vez) Licence to kill y sí, me sorprendió ver que Q tiene un papel más central a la trama, de hecho muy parecido a lo que ahora hace en SPECTRE.
Ernesto, pienso lo mismo que tú: de seguir Craig, sólo le va a tocar más sufrimiento. Yo pensé , al final de Skyfall, que ya lo iban a dejar en paz por ese lado, cuando entra a la tradicional oficina del nuevo M, pero veo que no. Así que si SPECTRE no fue el final de esta saga (la de Bond-Craig), pues la quinta tendrá que ser más oscura. Le tendrán que matar a la francesa. O rayarle la carrocería del Aston Martin.
Maldición: no recuerdo License to Kill. Voy a tener que volver a verla. Algún día.
En lo otro, ya que no lo quise decir, ya regaste el tepache. En efecto, si la evolución de Bond-Craig sigue por el mismo camino, a Léa la mata Blofeld -escapado de donde lo metan- y la quinta parte será la venganza de Bond. Y, a lo mejor, ya su despedida. (Espero que no Blofeld no le raye el Aston Martin, porque la reacción del 007 será nuclear, Jacobo, nuclear).
De Licence to Kill... las ideas son muy buenas y de haber tenido mejor voluntad/facultades para hacer (como dices) buen cine, sería una gran película. Todavía más en este tiempo de Chapos, etc.
En cuanto a las posibles acciones futuras de Blofeld, no trataba de regar el tepache pero ya que por allá arriba Jacobo Murillo mencionó el lazo entre ambos, pues ahí está el cliché que no te he mandado (precisamente por el tepache) pero que obliga a que el héroe y el villano tengan un origen mutuo (¿inaugurado en la era moderna por Batman y el Guasón?).