Icónica
Lo primero que me llamó la atención del número 0 de Icónica (revista de cine trimestral editada por la Cineteca Nacional) fueron los nombres que aparecen en su consejo editoral. Además del estimado colega Carlos Bonfil y de Abel Cervantes -coeditor también de La Tempestad- aparecen por ahí Jorge Ayala Blanco y Nelson Carro. Nada de malo que el nombre de uno aparezca al lado del nombre del otro, claro está, pero para todos los que recordamos o vivimos la guerra de los críticos de los años 70/80/90, ver a Nelson Carro -director de la extinta DICINE- formar equipo con Ayala Blanco, el enemigo público de los críticos cercanos a García Riera -como lo fue Nelson Carro- resulta, por lo menos, curioso. Sí, ya sé, chismografía esotérica, pero qué quieren: no resistí la tentación de apuntarlo porque creo que el hecho sí es inédito en la historia del pequeñísimo mundillo de la crítica de cine nacional.
Ahora bien, en lo que es realmente importante, es decir, su contendio, Icónica es la mejor revista de crítica de cine hecha en México desde las rivales DICINE y Nitrato de Plata -revistas en las que, por cierto, colaboré alguna vez y en mas de una ocasión. Bajo la dirección editorial de Abel Muñoz Hénonin -y con la colaboración de los editores cinéfagos José Luis Ortega Torres y Mauricio Matamoros Durán- Icónica presume un magnífico texto del especialista en cine latinoamericano Paul Julian Smith -"Espejos: Algunos cines latinos vistos desde México por un extranjero"-, un interesante ensayo sobre el cine minimalista nacional escrito por Germán Martínez Martínez, otro más sobre el mejor cine hecho en México en los últimos años -me refiero al documental, claro- cuya autoría es de Gustavo E. Ramírez, además de una amplia sección crítica con textos del decano Jorge Ayala Blanco, Carlos Bonfil, Nelson Carro, José Luis Ortega Torres, Mauricio Matamoros, Rebeca Jiménez, et al.
Hasta donde entiendo, la revista, cuyo tiraje es de 3 mil ejemplares, se ofrece gratuitamente en las salas alternativas de la Cineteca Nacional, en las sedes cinéfilas de todo el país -Cine Foro tapatío, Cineteca regiomontona, Cineteca tijuanense- pero, por supuesto, lo ideal sería que, además, tuviera una edición electrónica disponible para ser vista/revisada/descargada desde cualquier parte de México y el resto del mundo.
En el texto de bienvenida de Icónica, la directora de la Cineteca Nacional, Paula Astorga, invita a que festejemos el nacimiento de esta revista. Claro que sí: la festejamos y desde este blog, a ella y sus editores, le decimos, ¡salud!
Comentarios
creo que va siedo hora de que vuelva, aunque sea a las sedes alternas, a la CN reloaded
y al cine cine, pues estas semanas ha sido un poco dificil
saludos
Al menos ahora hay un respaldo institucional, que el editorial parece en paz y buenas manos
Es de tomar en cuenta
Fritzio: Esperemos que tenga más larga vida, en efecto.