Del odio al amor, un paso... y nueve películas juntos
El inglés Sidney Greenstreet (1879-1954) y el autro-húngaro Peter Lorre (1904-1964) aparecieron juntos en nueve películas -las más famosas, El Halcón Maltés (Huston, 1941) y Casablanca (Curtiz, 1942), en la foto, en la filmación de The Verdict (1946), bajo la dirección de Don Siegel, que aparece entre ellos- y en todas y cada una de ellas tuvieron problemas en el set. Greenstreet era un actor serio, concentrado, llegaba a la filmación con sus líneas aprendidas y se molestaba profundamente con las improvisaciones. Lorre era todo lo contrario: gustaba de hacer bromas, era muy inestable -sus problemas de adicción fueron legendarios- y, según dicen varias anécdotas, llegaba al trabajo preguntando no sólo qué escena se iba a filmar sino cuál era la película que estaban haciendo.
Nunca se notaron este tipo de problemas en las nueve cintas que Greenstrett y Lorre filmaron juntos y el actor centroeuropeo de M, el Vampiro de Düsseldorf (Lang, 1931) dijo alguna vez de su camarada inglés lo siguiente: "Greenstreet was not only one of the nicest men and gentlemen that I’ve ever known in my life, I think he was one of the truly great, great actors of our time". Claro que hubiera estado bien que, además, se hubiera aprendido sus líneas cuando fuera a trabajar con el amable gordazo de Greenstreet.
Comentarios
Ernesto, estas historias de Peter Lorre suenan extrañamente parecidas a las de Robert Downey Jr., ¿no?