De-BD Verse/III
La verdad, tenía meses con ella y no había abierto la
caja. Pero usted disculpará: la cajota es intimidante. Se trata de la edición
en Blu-Ray por el 50 aniversario de Ben Hur (Ídem, EU, 1959).
Se
trata de una presentación monumental de colección (el box set es de 20 x 30 cm),
numerada –la mía es la pieza 17,632 de 125,000- que contiene un vistoso
cuaderno de fotos, el diario personal que llevó Charlton Heston durante la
filmación de la cinta –la edición de este librito vale por sí misma: en su
interior trae copias de boletos de la premiere, varias fotos en blanco y negro,
y el facsímil de los apuntes del puño y letra de Heston- y, además, tres
inagotables discos.
Los dos primeros blu-rays
contienen la cinta remasterizada. Honestamente, yo había visto Ben-Hur en por
lo menos tres ocasiones –una de ellas en pantalla de cine, en mi adolescencia-,
pero la imagen que presenta esta edición es impresionante. La película está
acompañada con el comentario del historiador de cine T. Gene Hatcher y el
propio Charlton Heston, además de la
opción de ver el filme con solamente la música compuesta y oscareada de Miklós
Roózsa.
El tercer disco, con tres
horas de extras, es un agasajo para los fanáticos del filme. El plato principal
es una copia impecable de la Ben Hur silente, dirigida en 1925 con Fred Niblo y
con el mexicano Ramón Novarro en el papel protagónico. Pero los demás extras no
son poca cosa: un nuevo documental realizado para esta edición, “Charlton Heston
& Ben Hur: A Personal Journey” –escrito y dirigido por el hijo del actor,
Fraser C. Heston-, otro par de documentales sobre la película en sí, además de
la pedacería de siempre: trailers, fotos, escenas del Oscar 1960 –en donde Ben
Hur arrasaría con 11 estatuillas-, fragmentos de noticieros y demás.
En
cuanto a la película en sí, dirigida por el prolífico y versátil artesano
William Wyler, ¿qué podemos decir? La producción hollywoodense es impecable, la
presencia de Heston llena la pantalla y la trama es lo suficientemente
entretenida como para sostenerse durante más o menos tres horas, hasta que
sucede la célebre secuencia de la carrera de cuadrigas, uno de los momentos más
famosos en la historia del cine. Sin embargo, después de esta secuencia, en los
últimos cuarenta minutos de la historia, la trama se estanca hasta que, en
lugar de terminar, yo diría que se agota. Y es que es tal la fuerza que ha
logrado el filme hasta ese momento, que todo lo que continúa después resulta
ser, hasta cierto punto, anti-climático.
Con
todo, creo que Ben Hur es de esos
filmes que todo cinéfilo debería ver por lo menos una vez en la vida para
entender lo que eran las épicas romanas hollywoodenses. Y si se ve en esta
agotadora edición en BD en la pantalla más grande que tenga usted en su casa,
mucho mejor.
Comentarios
a.
Si no me falla la memoria, Ben Hur es repetida hasta el cansancio cada que llega semana santa. Y es extraño pero cada vez que me la topo digo algo "¿otra vez?", sin embargo hacen falta un par de minutos para quedarse picado y no despegar la vista de la televisión.
Saludos.